Ya os hemos hablado sobre los tipos de garantías que existen para vehículos de segunda mano, sobre las revisiones e incluso sobre los trámites, pero, ¿qué hay de la financiación?

Son muchas las personas a las que les gustaría acogerse a esta modalidad de pago cuando se trata de comprar un coche o moto de segunda mano al igual que son muchos los particulares a los que les gustaría poder ofrecer este servicio a la hora de venderlos.

Lo cierto es que, hoy en día, las alternativas que se existen para gestionar este tipo de transacciones sin concesionarios de por medio son, solicitar un préstamo bancario, solicitar un préstamo a una financiera de crédito o pactar un pago a plazos con el propio particular.

Requisitos para financiar un vehículo de segunda mano

Los requisitos para financiar un coche o moto de segunda mano dependerán de con quién contrates el crédito, aunque por normal general, existen unos mínimos:

  • Ser mayor de edad, aunque no se suele aprobar préstamos a menores de 25 años.
  • Tener un perfil solvente con ingresos demostrables.
  • No estar en una lista de morosos por deudas financieras.
  • Fotocopia del DNI
  • La última nómina o ingresos en los últimos 3-6 meses.
  • La última declaración de la renta.

 

Tipos de financiaciones para vehículos de segunda mano

Financiación con una entidad financiera de crédito

Podrás disfrutar antes del dinero ya que al operar a través de internet son más rápidas en analizar las solitudes.

No exigen contratar otro tipo de productos como tarjetas, seguros o cuentas que lo único que hacen es encarecer el precio final del préstamo.

Las cifras que conceden no suelen ser tan elevadas como las de los bancos, pero siguen siendo cantidades bastante altas, de hecho, son más que suficientes para comprarte un coche de gama media-alta o alta.

Pactar un pago a plazos con el vendedor

En la compra entre particulares también existe la posibilidad de fraccionar los pagos si el vendedor se presta a ello, pero es muy complicado que se de esta situación ya que al tratarse de una operación entre completos desconocidos, el nivel de desconfianza es muy alto.

Para solucionar este tipo de problemáticas existen empresas como Revisa2 que actúan como intermediarios para que estas transacciones se realicen de forma segura para ambas partes ofreciendo servicios enfocados tanto a compradores como a vendedores que van desde la revisión previa del vehículo hasta su transporte pasando, por supuesto, por ofrecer una financiación propia para operar con las máximas garantías.

Financiación con un banco

Lo común es que te pidan contratar otros servicios, como pueden ser seguros, tarjetas de crédito o cuentas, para poder ofrecerte un interés más atractivo.

Son los agentes financieros que conceden las sumas más altas para financiar un vehículo, aunque los tipos de interés se encarecen mucho si lo pides para financiar uno de segunda mano.